Una reciente decisión judicial en Estados Unidos podría transformar la forma en que los usuarios de iPhone compran contenidos y suscripciones dentro de las aplicaciones. Aunque parece una victoria para los consumidores, la realidad es más compleja de lo que parece.

Durante más de una década, instalar aplicaciones en un iPhone ha sido un proceso sencillo: buscar la app, pulsar un botón y descargar. Sin embargo, pagar por ciertos servicios o productos virtuales, como suscripciones o artículos dentro de juegos, ha sido otra historia.

Hasta ahora, Apple gestionaba todas las transacciones dentro de las apps y cobraba comisiones que podían llegar hasta el 30%. Esta política llevó a empresas como Netflix o Amazon a sacar sus procesos de pago fuera de las aplicaciones, obligando a los usuarios a usar navegadores para completar sus compras.

Esa realidad podría estar cambiando. Una jueza federal de California, Yvonne Gonzalez Rogers, ordenó a Apple permitir que algunas aplicaciones redirijan a sus usuarios a sitios externos para realizar pagos, sin tener que pagar ninguna comisión a la empresa. Esto significa que los desarrolladores ahora pueden incluir botones o enlaces que dirigen a los usuarios a sus propias plataformas para comprar suscripciones, libros, música o podcasts directamente.

Algunas compañías ya están aprovechando esta nueva libertad. La app Kindle de Amazon, por ejemplo, añadió un botón para comprar libros electrónicos. Patreon, plataforma de suscripciones a contenido exclusivo, comenzó a mostrar precios más bajos. Y Spotify ahora ofrece pruebas gratuitas directamente desde su aplicación.

A pesar de estos casos notorios, la gran pregunta es: ¿serán más baratas ahora las suscripciones o los productos virtuales en general? ¿Será más fácil comprar contenido desde el iPhone?

Consultando a desarrolladores de diferentes tamaños, la respuesta es menos optimista. La mayoría coincide en que, aunque algunos precios puedan bajar ligeramente, en general los costos seguirán siendo los mismos. Según Eric Seufert, autor del medio especializado Mobile Dev Memo, “los desarrolladores se quedarán con las ganancias adicionales. No veremos precios más bajos”.

¿Qué llevó a este cambio?

Todo comenzó en 2020, cuando Epic Games, creadora de Fortnite, demandó a Apple por prácticas monopolísticas al obligar a los desarrolladores a utilizar exclusivamente su sistema de pagos. En un fallo inicial de 2021, la jueza González Rogers ya había ordenado a Apple permitir enlaces externos para pagos.

Sin embargo, Apple respondió estableciendo una nueva política que aplicaba una comisión del 27% sobre las compras hechas a través de esos enlaces. Esto desmotivó a la mayoría de los desarrolladores, que optaron por no usar esta opción. Pero el mes pasado, la jueza dictó una nueva resolución que prohíbe a Apple cobrar cualquier comisión por ventas realizadas fuera de su sistema.

Este cambio representa un momento clave para la industria de las aplicaciones móviles. Aunque no está claro aún si los beneficios llegarán de forma directa a los usuarios, lo cierto es que los desarrolladores tienen ahora más libertad para gestionar sus pagos y ofrecer precios competitivos fuera del ecosistema de Apple.

Para los usuarios salvadoreños —y de todo el mundo—, esto podría traducirse en más opciones y, con el tiempo, mejores ofertas. Aunque, por ahora, la verdadera magnitud del cambio sigue siendo incierta.